A PÍO XII-EUGENIO PACELLI-, EL PAPA
SUTILMENTE FIEL A LOS NAZIS Y FASCISTAS.
Dedicada al silencioso Eugenio Pacelli, Romano Pontífice que asumió su mandato con el nombre de Pío XII (1939-1958). El papa de la Segunda Guerra Mundial.
-Pío XII tenía algunas discrepancias con la Solución Final del Führer, pero decidió no comentarlas, aunque era un antisemita consagrado y competente.
-Cuando el odio a los judíos sin tapujos se apoderó de Alemania, el Vaticano insultó desde su balcón con fiereza al nacionalsocialismo y sus secuaces.
-La revista jesuita Civiltà Cattolica, aprobada por la Santa Sede, no superó el antisemitismo teórico del Tercer Reich, mas apoyó dentro de sus escuetas posibilidades a diseñar Auschwitz.
-Con el Derecho Canónico se divinizó la libertad de conciencia y la desjerarquización, ya que todos somos iguales ante el Padre.
-Mediante el Concordato Serbio el vicario de Cristo hizo su insignificante y simbólico aporte al inicio de la Primera Guerra Mundial.
-Pío XII no veía ninguna diferencia entre un soldado de piel oscura y uno de piel blanca. Jamás pensó que los negros eran más coquetos. Es que era un prócer de la integración.
-La iglesia católica alemana no simpatizaba con el bautizado Adolfo Hitler, pero el bienaventurado Eugenio Pacelli los puso gaseosamente por el buen camino.
-El Romano Pontífice dijo de Benito Mussolini: ”un hombre enviado a nosotros por la Providencia”. Frases luminiscentes como esta robustecen la infalibilidad papal.
-Pascualina, una monja mucho menor que el futuro Pío XII, le acompañó día a día por más de cuarenta años, con una fidelidad mutua inviolable. El se la llevó al Vaticano a pesar de los chistes eróticos, mal intencionados.
-Pacelli no interpelaba a Salazar o a Franco porque le molestaba la autocrítica.
-Cuando el Secretario de Estado Pacelli firmó el concordato con Hitler, vio aparecerse en las sala a los doce apóstoles de Jesús con sus dedos pulgares hacia arriba.
-Edith Stein y algunos obispos le comunicaron a Pío XI sobre las persecuciones nazis y nada. La desidia fue brutal, ejemplarizadora.
-Alineado con el pesebre, Eugenio Pacelli se sulfuraba con la pompa, la fastuosidad, los privilegios y las actitudes principescas de algunos purpurados.
-Pío XII anatematizaba a hitlerianos y estalinistas con la misma iracundia y convulsiones. Lo que es justo es justo.
-En piadosa solidaridad con los etíopes bombardeados por Mussolini, Pío XII calificó por radio al Duce de genocida, sin vaguedades.
-Era tal la veneración de Pío XII hacia el tirano Francisco Franco que lo nombró protocanónigo de la romana basílica de Santa María la Mayor. El propósito era beatificar en vida al Caudillo español, que le dio un sentido cristiano a la guerra, a la matanza de opositores e inocentes.
-Es que con la democracia existe la fatídica posibilidad de que el gobernante elegido sea ateo, masón o apache. Lo más recomendable es una dictadura en donde todos aplaudan de pie y sin cesar a los vicarios.
-Cuando Adolfo Hitler promulgó la norma que definía quien era un maldito judío y quien no, Pacelli una vez más y con pericia se cosió los labios. Es que era un fascista diestro y nadie lo va a investir como el patrono de los engañados.
-El sermón más popular de Pío XII se llamó: “Ama a los gitanos, hebreos y homosexuales como a ti mismo o te pateo la cara”. Sus plegarias por los maltratados en la plaza de San Pedro eran estruendosas y penetrantes.
-Fue un asiduo mayordomo de la agenda de sangre de Hitler, a veces involuntariamente. Suponer que sólo fue un monigote o un imbecil es absurdo.
-Eugenio Pacelli se encolerizó con “La noche de los cristales” y comenzó ido a azotar nazis en las plazoletas.
-A Pío XII se le quemaban las manos por el deseo de publicar a la brevedad la antirracista encíclica “Humani generis unitas” o “La unidad de la raza humana”.
-Disfrazado de rabino, Pío XII jamás dejó de cantarle el happy birthday a un Führer “del pueblo alemán confiado a su liderazgo”.
-Pacelli bendecía con alborozo a los croatas patriotas y católicos guiados por el misionero Ante Pavelic y sus ustachis. La bandera del catolicismo flameó como nunca en Croacia. Los ustachis católicos asesinaron a cientos de miles de hermanos cristianos ortodoxos, mas no fueron exiliados de la madre iglesia romana, por razones superiores.
-Sacerdotes franciscanos armados fueron los mejores evangelizadores del criminal movimiento ustachi, rechazándose de plano las conversiones forzadas.
-Pío XII deliraba por ver la total libertad de cultos y de expresión en los países católicos.
-Los presbíteros que despedazaban abiertamente el antisemitismo recibieron miles de cartas de felicitaciones del Primado de Italia. Y los que fueron liquidados por revelar los atropellos de nazis, fascistas y comunistas, hoy son mártires de Roma.
-Una vez coronado como papa, escupió en el acto todo asomo de racismo o gesto antidemocrático, por una pantalla de cine.
-Con la ocupación de Holanda y el bombardeo a civiles inocentes, Pío XII enfrentó cara a cara al Tercer Reich, irritado. Tuvieron que amarrarlo.
-Su intenso y silencioso amor por aquellos que no eran católicos romanos realmente los sorprendió a todos.
-En estas circunstancias, la diplomacia apostólica consiste en no enterarse convenientemente de lo que ya se sabe y en archivar en un sótano seguro lo comprometedor.
-Si Pío XII tomaba conocimiento de que un católico había humillado a un judío o a un indígena, personalmente le enterraba una corona de espinas al bautizado involucrado en este agravio.
-Escudó con el mismo celo profético a todos los judíos, se hayan convertido al catolicismo o no.
-Los luteranos de Dinamarca y de otros sitios actuaron noblemente al cobijar judíos. Cuando al vicario de Cristo le comunicaron esta infamia, volvió a excomulgar con rabia a toda la civilización protestante.
-Hitler, Mussolini y Franco, eran su santa trinidad personal.
-El concordato Hitler- Roma trae a la memoria consecuencias y recuerdos imborrables.
-Sin vocablos rebuscados, el Príncipe de los apóstoles reprobaba por la radio todos los horrores de la guerra y de los totalitarismos.
-Cuando un obispo le disparaba a los nazis, fascistas o marxistas, era Pío XII quien le compraba los proyectiles.
-La Santa Sede abrió al público todos los documentos y cartas relacionados con Eugenio Pacelli como sacerdote, arzobispo, Secretario de Estado y papa. Ya no hay archivos secretos, porque no hay nada que esconder de este candidato a santo oficial.
-¿Qué libró a Pacelli del tribunal de Nuremberg?
Número 1463, del Catecismo de la iglesia católica:“Ciertos pecados particularmente graves están sancionados con excomunión, la pena eclesiástica más severa, que impide la recepción de los sacramentos…..”.
Evangelio según San Mateo 7:23
“Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartáos de mí, hacedores de maldad”.
NO SEAS CATÓLICO
http://noseascatolico.blogspot.com
http://lassotanasdesatan.blogspot.com
Dedicada al silencioso Eugenio Pacelli, Romano Pontífice que asumió su mandato con el nombre de Pío XII (1939-1958). El papa de la Segunda Guerra Mundial.
-Pío XII tenía algunas discrepancias con la Solución Final del Führer, pero decidió no comentarlas, aunque era un antisemita consagrado y competente.
-Cuando el odio a los judíos sin tapujos se apoderó de Alemania, el Vaticano insultó desde su balcón con fiereza al nacionalsocialismo y sus secuaces.
-La revista jesuita Civiltà Cattolica, aprobada por la Santa Sede, no superó el antisemitismo teórico del Tercer Reich, mas apoyó dentro de sus escuetas posibilidades a diseñar Auschwitz.
-Con el Derecho Canónico se divinizó la libertad de conciencia y la desjerarquización, ya que todos somos iguales ante el Padre.
-Mediante el Concordato Serbio el vicario de Cristo hizo su insignificante y simbólico aporte al inicio de la Primera Guerra Mundial.
-Pío XII no veía ninguna diferencia entre un soldado de piel oscura y uno de piel blanca. Jamás pensó que los negros eran más coquetos. Es que era un prócer de la integración.
-La iglesia católica alemana no simpatizaba con el bautizado Adolfo Hitler, pero el bienaventurado Eugenio Pacelli los puso gaseosamente por el buen camino.
-El Romano Pontífice dijo de Benito Mussolini: ”un hombre enviado a nosotros por la Providencia”. Frases luminiscentes como esta robustecen la infalibilidad papal.
-Pascualina, una monja mucho menor que el futuro Pío XII, le acompañó día a día por más de cuarenta años, con una fidelidad mutua inviolable. El se la llevó al Vaticano a pesar de los chistes eróticos, mal intencionados.
-Pacelli no interpelaba a Salazar o a Franco porque le molestaba la autocrítica.
-Cuando el Secretario de Estado Pacelli firmó el concordato con Hitler, vio aparecerse en las sala a los doce apóstoles de Jesús con sus dedos pulgares hacia arriba.
-Edith Stein y algunos obispos le comunicaron a Pío XI sobre las persecuciones nazis y nada. La desidia fue brutal, ejemplarizadora.
-Alineado con el pesebre, Eugenio Pacelli se sulfuraba con la pompa, la fastuosidad, los privilegios y las actitudes principescas de algunos purpurados.
-Pío XII anatematizaba a hitlerianos y estalinistas con la misma iracundia y convulsiones. Lo que es justo es justo.
-En piadosa solidaridad con los etíopes bombardeados por Mussolini, Pío XII calificó por radio al Duce de genocida, sin vaguedades.
-Era tal la veneración de Pío XII hacia el tirano Francisco Franco que lo nombró protocanónigo de la romana basílica de Santa María la Mayor. El propósito era beatificar en vida al Caudillo español, que le dio un sentido cristiano a la guerra, a la matanza de opositores e inocentes.
-Es que con la democracia existe la fatídica posibilidad de que el gobernante elegido sea ateo, masón o apache. Lo más recomendable es una dictadura en donde todos aplaudan de pie y sin cesar a los vicarios.
-Cuando Adolfo Hitler promulgó la norma que definía quien era un maldito judío y quien no, Pacelli una vez más y con pericia se cosió los labios. Es que era un fascista diestro y nadie lo va a investir como el patrono de los engañados.
-El sermón más popular de Pío XII se llamó: “Ama a los gitanos, hebreos y homosexuales como a ti mismo o te pateo la cara”. Sus plegarias por los maltratados en la plaza de San Pedro eran estruendosas y penetrantes.
-Fue un asiduo mayordomo de la agenda de sangre de Hitler, a veces involuntariamente. Suponer que sólo fue un monigote o un imbecil es absurdo.
-Eugenio Pacelli se encolerizó con “La noche de los cristales” y comenzó ido a azotar nazis en las plazoletas.
-A Pío XII se le quemaban las manos por el deseo de publicar a la brevedad la antirracista encíclica “Humani generis unitas” o “La unidad de la raza humana”.
-Disfrazado de rabino, Pío XII jamás dejó de cantarle el happy birthday a un Führer “del pueblo alemán confiado a su liderazgo”.
-Pacelli bendecía con alborozo a los croatas patriotas y católicos guiados por el misionero Ante Pavelic y sus ustachis. La bandera del catolicismo flameó como nunca en Croacia. Los ustachis católicos asesinaron a cientos de miles de hermanos cristianos ortodoxos, mas no fueron exiliados de la madre iglesia romana, por razones superiores.
-Sacerdotes franciscanos armados fueron los mejores evangelizadores del criminal movimiento ustachi, rechazándose de plano las conversiones forzadas.
-Pío XII deliraba por ver la total libertad de cultos y de expresión en los países católicos.
-Los presbíteros que despedazaban abiertamente el antisemitismo recibieron miles de cartas de felicitaciones del Primado de Italia. Y los que fueron liquidados por revelar los atropellos de nazis, fascistas y comunistas, hoy son mártires de Roma.
-Una vez coronado como papa, escupió en el acto todo asomo de racismo o gesto antidemocrático, por una pantalla de cine.
-Con la ocupación de Holanda y el bombardeo a civiles inocentes, Pío XII enfrentó cara a cara al Tercer Reich, irritado. Tuvieron que amarrarlo.
-Su intenso y silencioso amor por aquellos que no eran católicos romanos realmente los sorprendió a todos.
-En estas circunstancias, la diplomacia apostólica consiste en no enterarse convenientemente de lo que ya se sabe y en archivar en un sótano seguro lo comprometedor.
-Si Pío XII tomaba conocimiento de que un católico había humillado a un judío o a un indígena, personalmente le enterraba una corona de espinas al bautizado involucrado en este agravio.
-Escudó con el mismo celo profético a todos los judíos, se hayan convertido al catolicismo o no.
-Los luteranos de Dinamarca y de otros sitios actuaron noblemente al cobijar judíos. Cuando al vicario de Cristo le comunicaron esta infamia, volvió a excomulgar con rabia a toda la civilización protestante.
-Hitler, Mussolini y Franco, eran su santa trinidad personal.
-El concordato Hitler- Roma trae a la memoria consecuencias y recuerdos imborrables.
-Sin vocablos rebuscados, el Príncipe de los apóstoles reprobaba por la radio todos los horrores de la guerra y de los totalitarismos.
-Cuando un obispo le disparaba a los nazis, fascistas o marxistas, era Pío XII quien le compraba los proyectiles.
-La Santa Sede abrió al público todos los documentos y cartas relacionados con Eugenio Pacelli como sacerdote, arzobispo, Secretario de Estado y papa. Ya no hay archivos secretos, porque no hay nada que esconder de este candidato a santo oficial.
-¿Qué libró a Pacelli del tribunal de Nuremberg?
Número 1463, del Catecismo de la iglesia católica:“Ciertos pecados particularmente graves están sancionados con excomunión, la pena eclesiástica más severa, que impide la recepción de los sacramentos…..”.
Evangelio según San Mateo 7:23
“Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartáos de mí, hacedores de maldad”.
NO SEAS CATÓLICO
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